29 mayo de 2015
Leo al buen tuntún las páginas abiertas de un libro. Me atrapa la historia que cuentan: Una tribu decide consultar al chamán cómo de crudo va a ser el invierno y cuándo llegará. El chamán les dice que, pese al buen tiempo actual, el invierno va a ser crudo y llegará pronto. Cuando los indios se van, el chamán –por si acaso- decide llamar anónimamente al centro meteorológico. Allí le dicen que efectivamente parece que va a ser un duro invierno. Los indios recogen leña. Pocos días después y dado que persiste el buen tiempo, le vuelven a pedir una predicción. El hechicero dice: Recoged más leña, que el invierno será frio. Los indios le hacen caso y siguen almacenando leña. Al cabo de un tiempo, hartos de acumular madera, los indios vuelven al chamán y le dicen: ¿estás seguro de tus augurios?. Si -les responde- no tengo la menor duda. Pero cuando se van, el chamán vuelve a preguntar al Instituto de Meteorología, ¿acaso no podrían equivocarse? Los meteorólogos le dicen que tal vez, pero que no lo creen puesto que han comprobado que los indios no hacen mas que acumular leña.